El desarrollo del pensamiento musical o la conciencia de ser parte integrante de un Universo Musical se remonta al origen de la historia humana, pero antes de seguir quisiera ir al origen de la palabra «música» proveniente del latín «musica», derivado a su vez del griego mousiké (de las musas) y el sustantivo griego techne (arte o técnica), pudiendo decir que la Música es el arte o la técnica de las musas.
Las musas son divinidades femeninas que presiden las artes y las ciencias. Hay nueve musas reconocidas, nacidas todas ellas de nueve noches seguidas de amor entre Zeus i Mnemòsine. Cada una de las musas simboliza el arte pleno de sentido de los humanos. Son:
- Caliope: la musa de la poesia épica, representada con un estilete y una mesa escritorio.
- Clio: musa de la historia y la poesía heroica, representada sosteniendo un pergamino
- Erato: musa de la poesia lírica y la mímica. La acompaña una lira.
- Euterpe: musa de la música. Se la representa con la flauta doble que dicen fue inventada por ella.
- Melpomene: musa de la tragedia teatral, representada con un cuchillo y la máscara de la tragedia.
- Polímnia: musa de los cantos sagrados y la geometría. Aparece evocando la meditación.
- Talia: musa de la comedia y la poesía pastoral. La acompañan la máscara de la comedia y el cayado.
- Terpsícore: musa de la danza que, como Erato, se la representa con una lira.
- Uránia: musa de la astronomia, representada con una esfera y una espiga mirando al cielo.
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Terpsícore by Adela Tarnawiecki |
Cuenta la leyenda que las musas se presentan cantando y dicen que su primer canto fue en la celebración del nuevo orden cósmico al vencer los dioses del Olimpo frente a los Titanes. Tienen la virtud de resonar, inspirando a gobernantes, filósofos y profetas palabras justas, sabias y virtuosas con las que conquistar el corazón de los que las escuchan.
Edgar Varèse, compositor francés y uno de los innovadores de la música electrónica del siglo XX, define la música como «el arte del sonido organizado», a lo que John Blacking (etnomusicólogo y antropólogo social británico) añade una palabra acertada, diciendo «la música es el arte del sonido humanamente organizado». Para él la música es la expresión del desarrollo de la cultura de cada sociedad y pueblo y está inmersa en su orden social.
Y es que la sonoridad de la vida es la expresión musical de una ordenación dentro de un plan armónico. Como una sinfonía cósmica, las pautas rítmicas de la Naturaleza, las repeticiones cíclicas, los fenómenos de pulsación y vibración, la sucesión del día y la noche, el curso de la Luna y el Sol, el ritmo de las estaciones, el balanceo marino, las migraciones de ciertas especies, el latido del corazón, la cadencia al caminar, el sueño y la vigilia, el ritmo respiratorio, el acunamiento,… todo induce a percibir la maravillosa fuerza ordenadora de sonido y silencio en resonancia con la percepción de la Totalidad.
Existen leyendas muy antiguas de China, India, Grecia, América, que cuentan la influencia que ejercían sobre la naturaleza los chamanes, guías y sabios de la comunidad al entonar cantos y hacer sonar sus instrumentos. Su sabiduría provenía de la observancia de la naturaleza, aprendiendo a irradiar en la vibración adecuada para reforzar los procesos naturales del desarrollo. No creaban nada nuevo, sólo resonar con la armonía de la vida.
Muchos son los significados que podemos encontrar de armonía, pero hoy quiero hacer mención a la definición que Rolando Toro ha aportado. Dice así: «Armonía es movimiento-amor, actos de encuentro y vinculación que permitan unificar las partes aisladas para establecer puentes a través de los cuales circule la energía vital. Llegamos así a un nuevo concepto de armonía, cuyo único instrumento es la caricia. Una armonía pulsante, fluida, cálida, una armonía en la cual cada individuo encuentra el Amnios, el semejante que lo contiene».
Así es Biodanza, no crea nada nuevo. Rolando Toro afirmaba que la Biodanza no la creó él, fue la Biodanza que lo encontró. Toro estructuró lo que ya existía basándose en las ciencias de la vida, la percepción sistémica y su intuición, creando un sistema de integración humana, renovación orgánica, reaprendizaje de las funciones originarias de la vida y reeducación afectiva, donde música-movimiento-vivencia posibilitan la resonancia armonía con la cosmología de la vida.
¿Por qué la caricia? porque redimensiona el cuerpo ausente a la fuente originaria del placer de ser. Acariciar a nuestros hijos, a los amantes, a la amiga fiel, al compañero de viaje, a la mascota, al árbol del camino, acariciar el agua, el cielo y las nubes, al Sol y la Luna, al aire y el viento de tormenta, la flor, la espina, con la mirada, la presencia, el silencio, la risa,… Hay tantas formas de acariciar!!!!!
Bibliografia:
- Gottfried Hesketh, K. Premisas para conocer una cultura musical con el modelo de John Blacking
- Compositors francesos del segle XX. http://www.ca.vikipedia.org
- Ist richtig das? – Las musas- http://www.latinireges.blogspot.com
- Toro Araneda, R. La música en Biodanza. Curso de formación docente en Biodanza.